No engañaba el termómetro del coche al llegar a Guadalajara cuando marcaba 2ºC. Tampoco engañaba el perfil del recorrido, a dos vueltas, con esos dientes de sierra amenazantes... ambos ingredientes hacían presagiar una gran mañana para un corredor de monte travestido a atleta de asfalto. Y así fué. Después de recojer a Eusebio y pasar a buscar los dorsales trotamos 10 minutillos para calentar. Lo suficiente, además, para olvidarme de los tirantes pero sin renunciar al pantaloncillo corto. Con un buena organización y unos 400 participantes, nos juntamos todos en la pista de atletismo para la salida. Puntualidad en el bocinazo y a correr. Los kilometros van pasando en contínuo subeybaja y tras el kilometro 4 llega el gran repecho. Ni idea a que ritmo voy, en el kilometro 10 ya preguntaré. Cuando llega el momento pregunto, 37'27'' me dicen. Joder, que bien. A partir de aquí a pensar en bajar de 1h20'. Pero en la segunda vuelta no voy tan fresco y, aunque hasta el kilometro 19 lo veía posible, el tramo por polígonos y una última vuelta al estadio me dejan en meta con un tiempo de 1h21'31''. Muy contento con el resultado y convencido de ser sub37' en cualquier 10.000 planito o sub 1h20' en cualquier media sin rompepiernas.
4 comentarios:
Leches con ese tiempo como para no estar contento. ENHORABUENA !!!
buena marca, sí señor
Jodó que locomotora... como para no bajar de 37' en una 10k.
Tiempazo, que Guadalajara es jodida
Que moto menos mal que hacia frió que si calienta te recogen en Madrid
SUPER,SUPER......
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