martes, 26 de febrero de 2013

Coherente y uno

Ya se acerca el sábado. Ya llega el momento de pasarle otra vez por encima al 2 de marzo.
Desde el 1972 llevo ya unos días dando guerra y 'amasando' lo que ahora tenéis delante... eso si, nunca solo sino con ayuda de mucha gente. Pero no ha llegado el momento de evaluar nada sino de seguir dando forma a este trozo de barro que todavía (eso si, cada vez menos) esta tierno.
41 carnavales pasados y pronto 41 'semanasantas' con todo lo que metafóricamente representan ambas. He pasado los 40 sin comprarme la Harley, sin teñirme el pelo ni raparme la cabeza y sin haber vivido al límite pero con la sensación de haber cubierto bien mis etapas. Y, salvo algún episodio, convencido que la coherencia ha estado presente siempre en el paisaje que he ido dibujando. Eso si, visto en perspectiva la coherencia es algo propio del momento y asociado a la evolución y supervivencia (gracias Darwin). Quiero decir que un comportamiento coherente con lo que pienso ahora mismo no lo sería con lo que pensaba hace años/meses. Porque todo cambia y no vale anclarse a nada. Otra vez... solo lo creo.
A partir de ahora seguramente necesitaré gafas para ver de cerca, tardaré más en recuperarme de un ultratrail o de una borrachera, me sentiré más cerca de las viejas glorias que de las jovenes promesas, incluso ya he empezado a contar batallitas de abuelo Cebolleta...
Pero, por encima de todo seguiré intentando ser coherente. Coherente y uno.


sábado, 23 de febrero de 2013

Yo fluyo, tú (in)fluyes, él/ella (in)fluye.....

Desde hace unos días estoy 'de otra forma'. No se explicarlo mejor. Me miro en el espejo y veo alguien que no estaba la semana pasada. No importa, lo que veo me gusta. La ducha de cada mañana es el laboratorio de investigación donde mezclo pócimas para saber que me esta pasando. De momento la madera no se convierte en metal precioso. No he dado con la fórmula.
A lo largo del día vuelvo a tener picos de esta sensación. Buena. Me reconozco a mi en gestos, saludos, canciones, bromas...pero al 'mi' de hace tiempo. Vamos bien...
Hay una persona importante en mi vida ahora mismo que dice que los otros son espejos en los que nos reflejamos y eso nos ha de ayudar a ver como realmente somos. La primera vez que me lo dijo me quedé con la frase. Ahora creo que domino el concepto. Si te fijas en la persona que tienes delante, la conozcas o no, con la que interactúas (mirada, palabras, sonrisas...) puedes hacerte una idea de como estas/eres. No es tan fácil ¿eh? Requiere entrenamiento y práctica.
Pués el caso es que también aquí percibo sensaciones nuevas en el tú-a-tú con el otro. Contento.
Y la traca final: coger las riendas de tu propia vida. Eso si que es jodididididididididisimo de hacer. Pero no de intentar. Eso sí, si las pillas aprieta fuerte porque en un respingo inesperado te vas a suelo y levantarse de ahí ya cuesta un 'cacho' más.
Aguanta el lento ritmo de ir al paso, acompasa tu cuerpo al trote y sujetate bien durante el galope. Complicadillo, nadie lo duda. Tengo la sensación que todo es cuestión de ¿método? pero sin llegar subirse a unos raíles. Fluir que digo mucho ultimamente. Teniendo claro donde estan las orillas pero con una cuenca que permita flirteos con los puentes, presas, árboles y rocas que vayamos encontrando. Fluir, Einssss !!!

viernes, 22 de febrero de 2013

Aire fresco

Para ventilar se han de abrir las ventanas. De par en par y unas enfrente de otras. Que corra el aire. Nos empeñamos en abrir primero un lado y luego el opuesto y así solo da la sensación de que se ha renovado el caliente y enrarecido aire...pero no. ¿Autoengaño? Quizás.
Se han acabado las quejas, llorar por los rincones, penar por las aceras. Las cervezas cabizbajo han de dar paso a la fiesta de botellín. Con amig@s, con compañer@s.  Ha llegado el momento de empezar a recuperar la esencia, la autenticidad. El momento de que entre a chorro aire fresco, frío si me apuráis. Estoy abrigado.
El regreso a la piscina y volver a correr son dos ventanas cerradas que ahora ventilan "mi" espacio. Más adelante vendrá la bici los fines de semana. ¡¡ Qué no quede ni un rincón con olor a cerrado !! Hasta los pies de gato han vuelto 'tocar' resina -de momento. La vida no es más que no dejar pasar ni un solo momento sin disfrutarlo. Y eso es lo que se ha de intentar.
Nos vemos YA en la montaña o en los bares. Y si no, aquí tendremos un punto de encuentro de nuevo.