Jornadas Micológicas en el pueblo y como corresponde a la intensa actividad desarrollada nos hemos contagiado, y ha sido un fin de semana intensivo de setas. Pinar p'arriba, pinar p'abajo. Y así la tarde del sabado y la del domingo. Ayer se salía por las ventanas del coche el cargamento de setas. Apartas amanitas, buscas boletus pero encuentras nizcalos, cambias la mirada -como decían Javi y Raúl-y encuentras tricholomas exquisitos. ¿Este es pinicola? ¿Y esta que huele como a anis y con el pié azul?... Anna ha disfrutado y dice que ha aprendido mucho con los maestros que hemos tenido. Yo abonado a la seta fácil, soy más duro de mollera y sigo siendo fiel a la seta de cardo -que poco abunda en los pinares que hemos visitado ;-)
Y el domingo, bien prontito, por la mañana con el regusto del último gintonic todavía en la garganta y con una buena heladita, sin pensarmelo mucho me eché a la calle para hacer mi tirada larga. Cambié el asfalto por caminos, por eso de hacerlo más ameno, y trote durante 1h45' con la mente puesta en San Sebastián. Me supo a poco pero eso, a 2 semanas del gran día, es bueno creo yo. La semana se ha quedado un pelín corta en entrenamiento ( 6h en totales, incluyendo 2h30' de bici) pero se ha compensado con otras cosas. Vamos, que tirado en el sofá de casa no me estado... esta semana más de todo, más setas -esta vez en el plato- y más carrera.
1 comentario:
El sábado corriendo por Viñuelas había una hordas y hordas de expertos mícólogos buscando guarnición para sus estofados. Por si te quieres venir a buscar setas por otros lares.
Ellos apenas me vieron a mi... de la velocidad que llevaba se entiende :-)
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