Se podía, se podía...

Día de mucho calor en la sierra de Madrid, lo cuál, viendo la tarde de tormenta de ayer ha sido una alegría. Yo llevaba una manga larga y un chubasquero por si se torcía el día en el alto de Morcuera. Después de juntarnos con Javi y Cristina en la gasolinera entre Soto y Miraflores tiramos para arriba a recoger el dorsal. Ahí está, inconfundible, con su trote característico e inconfundible, Pedro Gracia, un gran tío y un gran corredor...abrazos, saludos, charleta, despedida de las nenas y a subir La Najarra. El grupo se estira rápido y siempre llevo a la vista la cabeza de carrera, voy pasando gente y buscando mi hueco antes de la primera bajada técnica. Me encanta esta carrera, las vistas, el camino y el sube-baja que pone a cada uno en su sitio. Van pasando los kilometros y va haciendo más calor. ¿Tendría que haber llevado agua? Seguro. ¿Qué tal le irá Javi que ha dejado la riñonera con el bidón en el coche?. Después de un gran llano llega la subida a Cabeza Mayor. Antes de empezar a subir el primero ya ha coronado...vaya ritmo !!

Una bajada más, la subida a Valdemartín y la Bola del Mundo a tiro. Durante toda la carrera bajando paso a Pedro, subiendo el me trae a la cruda realidad. En la bajada por debajo del telesilla al alto de Navacerrada nos juntamos y llegamos a la vez a meta; estoy contento, entrar con Pedro es algo grande, me llena de satisfación. Al final objetivo conseguido: 2h13'00'', el 9º en meta.

Una hora (3h13'36'') después llega Javi, un pelín justo de fuerzas pero haciendo un tiempazo para no haber entrenado nada, si, nada de nada....

Y ahora a por otra aventura....