Pues al final me traje el neopreno tan seco como me lo había llevado. El sábado por pereza y el domingo porque hacía un viento desagradable, el caso es que no nade nada de nada aunque si traje el traje ;-) Y como estamos de tapering, pues eso, una de bravas, unos chocos, unas gambitas, croquetitas de pollo y una de pulpo. Todo regado con un par de jarras frías de cerveza y un cortadito...olé mi niño, finisher sin sudar una gota. Eso sin contar que el sábado por la noche estuve de cumpleaños. Pasamos un rato cojonudo con amigos de mi época dorada de escalador. Fotos y fotos. Birras y birras. Recuerdos y recuerdos... una gente sana que sigue dedicados al noble arte de subirse por las piedras.
Pero se acabo el cachondeo, ya ha empezado la lucha por la camiseta. Desde anoche ya estoy ganando puntos para ser un hombre de hierro. De momento voy a pasar una semana sin mis nenas. Eso ya es duro de por si. Además me he pasado toda la noche metido en un autobús y estoy recién llegado a Madrid. A ver esta tarde que cuerpo tiene el señorito, porque algo habrá que hacer, aunque sea dar 4 brazadas o 4 zancadas. En fin, que antes de darnos cuenta estamos con el dorsal puesto más cerca de África que de Guadalajara ¿no?.
5 comentarios:
Que poquito quedaaaaaaaaaaaaaa!
Seguro que con los nervios se gasta más que con los entrenos así que nada mejor que bravas, pulpito, cervecita, jamoncito... para hacer base a los PowerGel de Lanzarote. No?
Sin comentariosssssss
Que salga todo bien
Pareceis los cuatro jinetes del apocalipsis. Mucha pinta de free-climbers con esos cascos de calimeros no teneis...
Yo no salgo en la foto pero te aseguro que si montara en bici y escalara y solo tuviera dinero para comprarme un casco, sería para escalar.
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