jueves, 28 de junio de 2007

Dame veneno

Otro día más toca a su fin y, aunque la noche se acerca a grandes zancadas, el plato de las cosas por hacer aún esta casi lleno. Lleno de mis vicios, que como son los más flexibles siempre se cuelan entre el resto, hasta el fondo, y quedan para el final. Por la mañana te montas lo que pueden dar de si las, más o menos, 18 horas que tienes por delante. Luego el día te va poniendo en situación y vas estirando las horas hasta casi romperlas. Curro y familia se reparten la mayoría de este tiempo, por desgracia más el curro que la familia, pero aunque sea tarde ( a veces ha sido pronto) hay que tomarse la dosis diaria de veneno....y algunos días, si se puede, doble ración. La dosis de la piscina no suele ser tan necesaria. Con un par de cucharadas a la semana tengo suficiente. El cloro me satura. O quizás el techo de la instalación donde, día a día, me empeño en demostrarme que soy capaz de nadar con el cuerpo paralelo al fondo y siguiendo la línea azul. La bici, sobre todo en grandes dosis, queda para el fin de semana. Envenenaito perdido, un sábado o domingo después de 3 o 4 horas de rodar es lo mejor que hay. Y luego da igual lo que te echen, ¿verdad? Y, por si fuera poco, esta el veneno, comprado por cajas, de la carrera a pie. Desde trote cochinero hasta galope tendido, todo vale. Es lo que tiene. Un par de zapatillas y poco más. Un camino o una carretera. Mira que somos simples.

martes, 26 de junio de 2007

Y ahora... Galarleiz

La rodilla esta sana. Y eso que aun luce hermosa costra plateresca que se cae trozos. Estéticamente un asquito pero las secuelas del golpe ya han desaparecido. Eso es lo importante, aunque no se vea. Por eso ayer, una semana después del MAM salí a entrenar. Corrí y sudé como un campeón y eso que habían pasado de largo las 8 de la tarde. Vestía camiseta ToroLoco del mercadillo de los lunes, que no es lo que precisamente conocemos como ropa técnica. No es que mi fondo de armario no de para más pero es la que tenía mientras parasitaba el sofá y, claro, por eso de ahorrar energías...
Y ya sabéis lo que pasa con el calor. Se empiezan a nublar las ideas igual que se desdibujan las lindes del camino, se hincha la vena y se disparan las endorfinas, hierve la sangre y las piernas piden guerra. Pués nada, a muerte. El día 22 de Julio las llevaré de excursión al norte. A correr. A correr y a andar. Por los montes de Ordunte. A conocer la zona que se encuentra entre Castilla, País Vasco y Cantabria. El sitio debe ser una pasada y la comida... Bueno, nos ponemos a ello, que al final se animan a venir, en modalidad marcha otros dos golfos del bodorrio del sábado. Iremos contando.

lunes, 25 de junio de 2007

¡¡ Vivan los novios !!

Puff, que fin de semana de deportista "pofesional" venido a menos que me he pegado. Pero es lo que pasa. Una amiga de toda la vida que se casa. Unos colegas que no se dejan llevar por el buen camino. Unos abuelos que se apuntan a hacer de canguros. Una mujer que quiere bailar. Una barra libre. Y uno que es un flojo...pués nada. Nos bebimos más copas que horas tiene un ironman, y además un puro. De esos con retranca, vengativos, de los que se quedan agazapados en los empastes y al día siguiente se empeñana en recordarte la mala vida que le diste el día de antes. Los mórdiscos y los achuchones que le das te los devuelve en forma de lenguaestopa y dolor de cabeza. Gintonices a tutiplen, el baile de la botella, agarraos y roncanroles... Y cuando ya llevaba un rato la luna en lo alto decidimos darle un minihomenaje a El Fary como previo a una sesión de karaoke frustada por fallos técnicos -hasta tuvimos suerte y todo-. Del domingo mejor ni hablamos. Encima del sofa, justo debajo del hueco donde normalmente va el reloj de pared que ahora esta en el taller, un trozo de tío intentaba pasar desapercibido a una nena de 18 meses que repetía una y otra vez: ¿papá?¿papá?¿papá? y señalaba con el dedo preguntándose que pasaba. Nada, que esto de juerguista también debe ser genética... ¡¡ Vivan los novios !!

martes, 19 de junio de 2007

¿Todotorreno ó culo de mal asiento?

A raíz de los comentarios vuestros -gracias a todos los que os molestáis en escribir algo o simplemente en leer- y en plena meditación con la pata en alto, me he dedicado a hacer un poco de repaso mental de lo que va de año. La verdad es que una forma de ver lo que llevo a la chepa es la denominación que da Talín de todoterreno. Repasando el 2007: la media maratón de Santa Pola, la maratón de Barcelona, el duatlón de Arrigorriaga, el ironman de Lanzarote y ahora el Maratón Alpino...joder, si es que no hay por donde cojerlo. ¡¡ Cómo para hacer un entrenamiento específico para algo !!
Yo, mejor que el calificativo de todoterreno prefiero lo que siempre decía mi abuela de mi: este niño es un culo de mal asiento. Todo lo tiene que mangonear. Más va por ahí la historia, porque lo que me gusta es enredar, mezclar, experimentar distintas sensaciones, hacer el indio en definitiva. Y vuelvo a tirar de otra frase de mi abuela para contestar a Tante que pregunta si no conozco la palabra descansar. Cuando, siendo niños, nos poníamos a las ordenes de la madre de mi padre para temas laborales -véase labores de campo o relacionadas con el ganado-, no había quien se escaqueara. Agotados de tanta actividad nos quejábamos a la patrona pidiendo el tiempo y una sombra para descansar. La buena señora se enderezaba y pasándose la mano por la frente decía: "cambiar de actividad es descansar. Tu haz lo que hace tu hermano y al revés " y se quedaba tan ancha. Amén.

lunes, 18 de junio de 2007

MAM 2007..."solo" 32 kms

Y al final llovió...no el día de la carrera sino el día antes, la noche antes y también durante. Pués eso que ayer nadube el Maratón Alpino Madrileño: Carrera épica cayéndose el cielo a trozos. En la salida deciden cortar el bucle de subida a Peñalara y bajada por Claveles por demasiado peligroso -sabia decisión- por lo que se queda en 32 kilometrillos de . Salimos ya calados hasta los huesos y apretando como si fuera un 10.000. Joder la peña, le quitan un trocillo y alé, a reventar... Subimos desde Cercedilla a Navacerrada por el camino del Calvario -típico camino por el que bajan los del freeride- cruzando un riachuelo varias veces, algunas con agua hasta la rodillas. Algo de barro que hace presagiar un regreso sucio. Al llegar a Navacerrada estan mis incondicionales animadoras bajo la lluvia; besitos a las chicas y empieza el tute de subir a Bola del Mundo, más agua y añadimos niebla. Mucho aire frío, frío y la parte derecha del cuerpo -de donde soplaba- se me queda insensible. No se ve a 5 metros delante. Bajada a machete por la loma del Noruego hasta Cotos, tocamos avituallamiento y vuelta para arriba por donde has bajado. Sigue lloviendo, no paró ni un minuto. La subida de regreso hasta Bola del mundo cruzándonos con los que bajan. Alguno al borde de la hipotermia, la gente es cuando menos temeraria -no se puede salir a correr en tirantes, cooooño. Esta vez es el lado izquierdo el que se queda dormido por el aire, frio de cojones, sobre la ropa mojada. La bajada hasta Navacerrada jugándome el tipo por debajo del telesilla. Repechón del telégrafo y ya, de tirón, todo para abajo otra vez por el Calvario. Dos hostiones por el barro, uno de culo y otro de cara con una raiz que me ha dejado la rodilla derecha con una buena herida e hinchada. Al final 3h32'32'' en meta, el 23º de 276 que acabaron la prueba -no salimos todos-. Contento pero creo que con los 44 kms enteros habría mejorado algún puesto. Javi y Raúl se estrenaron en el Cross y las chicas, como siempre, al más alto nivel de animadoras. Carrera de las que se recuerdan toda la vida. A ver si consigo alguna foto y la cuelgo por aquí.

sábado, 16 de junio de 2007

Sponsor oficial: Casa Tarradellas

Joder majos, me acabo de meter entre pecho y espalda una pizza+ cervezorra XXL que estoy a punto de meterme en la cama a hacer la boa. Y de postre un batido de fresitas y platano con leche de soja de los de litro... todo eso para que mañana no falle el gasoil ;-)
Hace un momento he vuelto de recojer el dorsal. Bajo la atenta mirada de la estatua de Paquito Fernández Ochoa (D.E.P.), campeón olímpico el año que nació servidora, estaba la gente de la organización repartiendo dorsales. Parapetados bajo el soportal del ayuntamiento, con cara de fresquito pero con mirada pilla de "como no deje de llover mañana no va a hacer falta ducharse en 10 días".
Buen ambientillo, caras de ganas de que llegué (o de que pase, a escojer) y mucho tirillas que tienen las patas más delgadas que yo los brazos. Ya no queda nada. Mañana a las 8 nos sueltan sierra arriba y que cada uno haga lo que pueda. Si llueve nos mojaremos y si no contaremos, a polvo pasado, todo lo que había llovido en la edición XI del Maratón Alpino, justo hasta el día de antes y luego, el día de la carrera, nada de nada. Como dice mi padre, hacer no haremos mucho pero el caso es contar algo...
Mañana (o pasado) más, igual hasta con afotos.

jueves, 14 de junio de 2007

¿Y si llueve el domingo?

Vuelve a llover. Refresca. Con el Maratón Alpino a tiro de piedra lo primero que me viene a la cabeza es la bajada por Claveles con lluvia. Nos vamos a echar unas risas si toca lavar la sierra este fin de semana. Dicen las lenguas amigas que ", que pa'l domingo to'seco. Cuatro gotas hoy y mañana y listo. Este agua va mu'bien. Quita el polvo del camino y reverdece los campos".
Pues si es así, listo. Yo que, cuando me interesa, me lo creo casi todo ya estoy viendóme con chubasquero en la salida de Cercedilla. Porqué si hay que correr se corre, aunque caigan chuzos de punta. Que un tío de Avila no se achica así como así. Si en Zarautz salieron palante con el empleo hace una semana, aquí, los del monte, no vamos a ser menos ;-)
Ahora que hago memoria, creo que fue en el duatlón de montaña de Sat Hilari Sacalm hace unos cuatro años cuando nos cayó una chupa de agua que tuvimos que tirar de remos en el tramo de bici. Al recojerla de boxes había que rascar el dorsal para saber cual era la tuya...sssageraooooo !!!
Bueno, que se preparen sobre todo los de los avituallamientos si llueve porque, a parte de mojarse, igual se vuelven para casa con media carga de agua. Que ya se sabe que con calor nos bebemos hasta el agua de los floreros pero si llueve uno no pasa tanta sed ¿no? Veremos...yo por si acaso me voy a apretar otra Mahou 5 estrellas mientras ceno.

martes, 12 de junio de 2007

Noches de verano...

...sueños de todo el año. Uno no lo puede evitar. Debe ser el calor de estos días, o mejor, de estas noches. Te tumbas en la cama por la noche y, mientras por la ventana abierta se cuela algo de aire fresco -¿dónde estás cuando salgo a correr, jodío?-, la imaginación sale por el hueco entre la persiana y las macetas con lavanda del alféizar. Con las pocas fuerzas que ha dejado el día, escapa y vuela libre, dejando sobre la sabana a un tipo con los ojos cerrados, a medio vestir, que de vez en cuando se gira para abrazarse a su media naranja. Ella duerme, ajena a todo, y solo cuando siente el calor de otro cuerpo cerca se remueve buscando territorios más frescos. Antes de dormir me permito el lujo de, mentalmente, flirtear con todo tipo de carreras y movidas donde algún día me gustaría ir. Fantaseo viéndome en linea de salida del maratón de la Antartida. Camuflado dentro de capas de ropa y goretex troto a un montón de grados bajo cero, mucho frío fuera, mucho calor dentro... otras veces le paso la mano por el lomo al Norseman que hay cada año en Noruega. Salto del barco nodriza en medio del mar y nado hacia la costa, allí espera la bici y luego la maratón de montaña. Largo y excitante día por delante. Otras veces sueño con la Marathon des Sables y el desierto. Carrera en autosuficiencia, como un caracol con la casa a cuestas. Y no me quedo sin encordarme a pie de vía en cualquier pared de Patagonia. Mil metros to'parriba, guauuu !!. El cansancio tarda poco en llegar y antes de poder saborear en mucho detalle ninguna de estas maravillas vuelve a entrar mi otro yo por la ventana. Se tumba a mi lado. Me vuelve a empujar junto a Anna y ahí, enganchado a ella, cargando baterías como el móvil enchufado a su cable, me quedo dormido, agotado, sonriente, ilusionado...

domingo, 10 de junio de 2007

Fiebre del sabado noche

El fin de semana da los últimos coletazos y deja tras de si un sabor extraño, atípico, de sensaciones encontradas, de susto que deja paso a un alivio relativo. Dos días escasos que, puestos en fila, dan el aspecto de muchísimo más de 48 h. pero que mirando hacia atrás no pesan más que un puñado de minutos. Uno llega al viernes con la lengua fuera, el rostro desencajado y dando pases de pecho a todo lo que signifique joder el fin de semana. En cuanto sales del curro todo se despeja y se abren claros por todos lados. El sábado ya tengo plan, con Anna y Alba "enmochilada" vamos a hacer la primera parte del MAM. La subida que corresponde al Cross del Telégrafo. Esta zona, que pertenece al nuevo recorrido, no la conozco de nada y la excursión en familia es una buena excusa para pegarle un tiento. Una primera parte de camino polvoriento y una segunda de camino estrecho y enraizado que harán las delicias de todos el próximo día 17. Salen unos 9 kms. todos para arriba pero por sitios donde la cuesta queda en segundo lugar gracias a la belleza del sitio.
Esa misma noche, el día antes de la tirada larga por el monte, Alba bate record de fiebre y nos despierta con 39º de fiebre. Chute de Dalsy y duermevela familiar que nos lleva a Urgencias. Catarro heavy con infección de oídos y domingo casero con jornada de reposo. Parece que a estas horas la princesa duerme tranquila. La amoxicilina hace milagros. Yo no soy partidario de antibióticos pero reconozco que en determinadas situaciones funcionan. Esperemos que mañana vuelva a ser ella y el domingo que viene este gritándome cuando pase por Cotos camino de Cercedilla.

viernes, 8 de junio de 2007

Fauna

Invasión de conejos. De los de campo. Sales a correr y casi los tienes que ir apartando a patadas. Cruzan por delante, por detrás, corren al lado. Un bando de perdices levanta el vuelo espantada por el galope del guerrero que llevo dentro. Un abejaruco, luciendo plumaje, sale de entre unas encinas y después de dar dos vueltas vuelve a posarse. Jodío bicho, mira que es bonito. Más adelante es una oropéndola la que me pasa a dos cuartas de la cabeza. Que gustazo poder correr por sitios así. Luego hay otra fauna que no da tanto juego: dos guardas forestales que algún día debieron estar en forma vigilan con prismáticos los alrededores. Suben con los 4x4 a un cerro y ahí, apostados como monteros en su puesto, dejan pasar la tarde y morir otro día más. A lo lejos dos beteteros de reciente afición. Con todo a la última moda pero...coño ¿y el casco? Claro, es que uno se despeina y además no lo había a juego con la Trek último modelo que lleva entre las piernas. Otro elemento, aguerrido gañán autóctono, fuma un puro dentro de su C15 mientras del retrovisor cuelga una correa de la que van enganchados 5 o 6 galgos. El mister los debe estar preparando para la temporada de caza... la postal es de foto. Y mientras se pone el sol al fondo, por detrás de la Cuerda Larga.
En fin, que uno no se aburre. Qué una horita de carrera da para todo y qué cada loco con su tema. Como mola. Pero si tengo que quedarme con algo, que me dejen los bichos y se lleven a los "seres racionales".

jueves, 7 de junio de 2007

D'aquípallá

Derrochar imaginación es algo que puede ser bueno o malo. Para mi, siempre bueno. Salir a entrenar -sobre todo correr- es un buen momento para desinhibirse de un montón de chorradas que no te dejan ser tu mismo durante el día. Uno, mientras corre entre campos de cereal, puede aprovechar el tiempo para muchas cosas. Yo monto y desmonto historias, voy y vengo cien veces a otros tantos sitios, construyo y destruyo viajes a lugares de lo más variado, traigo a mi lado y devuelvo a su casa a mis amigos... imagino, sueño, a veces deliro.
Ayer, en un alarde de chulería y con dos días de auténtica locura a la espalda, me calcé mis zapatillas y, con las 21:00h cumplidas salí a correr una hora. Con la cabeza todavía más tostada que las patas por culpa del avión me fui a dar una vuelta por la última noche de copas en mi pueblo. Andabamos todos preocupados por nuestros quehaceres al día siguiente -día de elecciones, por cierto- y no acababamos de centrar el tema. Pelotazo va, pelotazo viene, a ritmo de nuestro querido barman Alvarito, yo tiraba para el pasado, al Lanzarote de hacía una semana. Batallitas y aventuras que se encontraban con la jornada de pesca del día siguiente en el coto de la Herguijuela que tenía el gran Mansoni. Otro de la tropa preocupado por la carrera que podía hacer F. Alonso al día siguiente en Mónaco no quería ni oir hablar de truchas... por otro lado la boda del año pedía turno de palabra mientras que alguno solo insistía en que el gintonic con Nordic Mist no valía nada y pedía fanta de limón. Es lo que tiene quererse tanto y no verse todos los días ;-) Y así pasó el rato, mezclando lava con solomillos y cañas de pescar con curvas cerradas y paradas en boxes. Y también pasaron los kilómetros y de vuelta a casa me gusto sentir en el estomago esa sensación que te deja un buen rato con los amigos... o una buena carrerita.

lunes, 4 de junio de 2007

Al otro lado se vive mejor

Saltar la pared del prado enfrente de casa y correr hasta nuestro escondite. Allí, sentados en una piedra con forma de nave espacial a la sombra de una encina jugábamos a vuelos interplanetarios y aterrizajes de emergencia. Con un bocadillo de pan y chocolate en la mano y las rodillas peladas de pegarnos leñazos nos sentíamos los putos amos del mundo. El viaje duraba hasta que el comandante Madre nos llamaba a cenar, a grito pelado, desde la ventana de la cocina. Explorando nuevos mundos hacíamos la vida imposible a la burra que habitaba por aquellos lugares, nos camuflabamos y espiábamos a los clientes del hotel Manila o corríamos hasta el río para rescatar a compañeros atrapados por monstruos horribles, todo en misiones hipersecretas con terribles castigos para los cobardes. Las tardes de junio se hacían cortas jugando y corriendo. La imaginación ponía todo lo que faltaba -que era mucho- y como quijotes de pacotilla volvíamos a casa con la sensación del deber cumplido. Una vez saltada la valla en el sentido contrario entrabamos de nuevo en el mundo real.
Ahora, en días como hoy, busco esa pared y no me la encuentro por ningún lado. Mire donde mire solo hay desierto. ¿Donde esta esa valla que separa al mundo de los sueños? ¿Donde coños se para esta locura que nos hace a todos esclavos de nosotros mismos? Cuando llegue esta tarde a casa tomaré a Alba de la mano y, con un poco de suerte, espero que me lleve hasta esa pared. Si lo consigue, por muy alta que sea, juro que la saltaré. Todo para cambiar esta cara de gilipollas que me ha dejado este lunes...

viernes, 1 de junio de 2007

Animal de costumbres

Dentro del armario empotrado hay muchas cosas. Tantas que nunca encuentro el momento de ponerme a ordenarlas. Como una bacanal de vicios y hobbies se entremezclan lujuriosamente pies de gato -algunos pidiendo cambio de suela- con cubiertas gastadas para usar en el rodillo. También comparten rincón el neopreno, todavía algo salado, con 4 o 5 pares de zapatillas; la rueda de palos delantera que no viajó a Lanzarote cuchichea al oído de un par de mancuernas que nunca debieron venirse a vivir a casa; un camelbak, seco como una pasa, pide pista ahora que se acerca el verano y las carreras de montaña. En la estantería de los repuestos el viejo Discman, retirado de la circulación por el mp3, es la base donde se apoyan tornillería de lo más variado e incluso un viejo cuentakilómetros Cateye que me da pena tirar... y así trastos y más trastos.
Pero ayer, después de más de un año sin hacerle caso, abrí las puertas de par en par y busque con la mirada donde se supone que estaba. Como un cuatrero en la horca, ajusticiado por algún sheriff de poca monta, colgaba de un clavo mi mochila Berghaus. "Estas gorda" pensé, "necesitas hacer deporte y que te de el aire". Después recordé que era yo el que había puesto dentro la vieja cuerda de 60m de las útimas escaladas en Siurana y Montral, un bolsa grande de magnesio y una docena de cintas express completaban la barriga de mi chepa de fin de semana durante mucho tiempo. Con un guiño le hice saber que pronto saldría del exilio, le dije que este verano tendría trabajo, le conté que volvería a la montaña. Cerré el armario y mientras cenamos empezamos a organizar las vacaciones de este año. Sonaron sitios bonitos, acampadas en familia -a estrenar la experiencia-, excursiones y muchas cosas más.